Por David Oropesa

Tras más de 1 mes de encontrar el cadaver de la menor Wendely Raynely Polanco de 14 años de edad, en un avanzado estado de descomposición dentro de su vivienda en Samaná, tanto la comunidad de Honduras, así como madres y padres, amigos de la escuela y miles de personas preocupadas por este trágico suceso, se preguntan cómo sucedieron los hechos, mientras cuestionan el trabajo de la dirección provincial de CONANI, ya que afirman que la directora de esta institución tenía conocimiento de este caso hace casi 4 años.

La comunidad ha realizado marchas, encendidos de velas, reuniones y otras manifestaciones pidiendo que este caso sea aclarado y los culpables paguen por sus actos, la madre de la menor la abandonó hace ya más de 3 meses y a pesar que todo el mundo sabe que está trabajando en un drink en la Gina, provincia el Seibo, el ministerio público se ha cohibido de actuar, así como la incompetencia de CONANI, al no prevenir la muerte de esta menor, en 4 años si hubiesen actuado, hoy esta niña no estuviese muerta y menos de esa manera.

Muchas han sido las interrogantes desde que ocurrió este hecho, pero la pregunta que surge es la siguiente, si la niña no tenía familia, quien luchará para que se haga justicia? O acaso la comunidad de Honduras no tiene derecho de dormir en paz? Para los próximos días si no hay respuesta, líderes comunitarios están dispuestos a cerrar la única vía de acceso a Samana, porque este caso y la incompetencia de las autoridades responsables de CONANI, no pueden quedar impunes.

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