¿Qué es ser profesional?. Nunca es el faltar a la ética, al compañerismo, al respetar los espacios.

Un simple pero significativo altercado entre un periodista local y una persona perteneciente al equipo de redes de la Alcaldía de Santo Domingo Este produjo otro intercambio buscando esclarecer los hechos y marcando territorios.

El primer hecho ocurrio en un evento donde participaba el alcalde Manuel Jimenez, con su equipo de prensa incluido el nuevo «equipo de redes» y una de las que se empeñaba en sacar «las mejores fotos» (en su propias palabras)… y eso está bien… sin embargo, la más mínima etica de los que participamos en estos escenarios es «ajustarnos» unos al lado de los otros, tratar de agacharse lo más que se pueda, pasar incluso por detras a la hora de moverse pero nunca, nunca, ponerse delante como esa persona hizo.

Es claro, además, que los accidentes ocurren y es comprensible, también que, a quien le taparon su foco o le «dañaron» su toma, reaccione airado.

El nuevo equipo de redes de la Alcaldía de Santo Domingo Este es muy posible que tengan cursos de estas, mercado, busca likes, sin embargo, en el terreno, en conferencias de prensa y demás, deben, tienen, que comportarse con ética, como gente de la prensa, sin agredir de ninguna forma a sus compañeros y la peor forma de agredir es «metiendose delante de la toma«.

En un encuentro casual entre periodistas del municipio,en la Dirección de Comunicaciones, revisando el «altercado», algunos miembros de ese equipo de redes, cuando se «calentó» el ambiente amenazaron incluso en que se «volverían a meter».

Es seguro, si, que estas afirmaciones desafortunadas fuera producto de que la «victima» del reclamo del periodista en el terreno fuera una mujer y este, en defensa de la dama, tomando un evento «normal» como sexista, subiera el tono… sin embargo, es menester señalar que nadie, absolutamente nadie, debe meterse frente a la cámara de un compañero.

Es menester por ejemplo, citar el atrevimiento de un periodista de un canal llamado «de cobertura nacional» el día de la rendición de cuentas del alcalde que, en una entrevista que concedia uno de los recien electos regidores a la prensa local, este invadió por el «costado» y preguntó… es claro que se le puso en su lugar incluso, delante del entrevistado.

Este y otros ejemplos pueden sucederse en el ejercicio del periodismo pues, como seres humanos, unos son más atrevidos que otros, unos más respetuosos que otros.

El respeto lo es todo, absolutamente, todo.

Los eventos siempre son traumáticos, los que llegan tarde puede que terminen desplanzando a los mañaneros, unos son más agresivos que otros y el irrespeto incluso es usual… sin embargo, los del Equipo de Redes del Ayuntamiento deben tener claro que, sus sueldos lo paga la ciudadania, que en los eventos del Alcalde ellos no tienen prioridad sino que son «unos más», que la prensa local y la que no lo es merece todo el respeto y que su jefe, es el primero que actua con ética y profesionalidad, dando un alto valor a los que se levantan todos los dias, en la precaridad, sin sueldo alguno, a hacer lo mejor por nuestra ciudad y eventualmente, cubrir estas actividades.

Nota adicional: Nadie es completamente el mejor, unos periodistas son mejores entrevistando, otros reseñando, otros en documentales, otros en la redacción, los hay estrellas del micrófono, existen los que se especializan en deportes, otros en educación, cada quien en su nicho, en su espacio, logra el exito o al menos, sentirse bien en lo que hace… nadie, absolutamente nadie, es mejor que nadie y aunque el conocimiento es quien muchas veces marca la credibilidad y el ser leído, visto o escuchado, es el respeto de nuestros iguales lo que verdaderamente hace que, al menos en el periodismo, terminemos siendo ponderados

@fdo_buitrago

No basta cuántos cursos apruebes llenando tu pared de cuadritos que nadie lee, no basta cuántos likes obtengas en las insípidas redes sociales, el conocimiento sin profesionalidad, sin ética, sin compañerismo, sin el más mínimo sentido común y respeto, no sirve absolutamente, de nada.

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