SANTO DOMINGO (Licey.com).- Dos de las figuras más sobresalientes de la pasada temporada de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana, se reencontraron este viernes en el Citi Field, previo al partido entre Mets de Nueva York y Rojos de Cincinnati.
Se trata del Jugador Más Valioso de la temporada anterior de la LIDOM, Ronny Mauricio y la sensación Elly De La Cruz, quienes tuvieron un encuentro especial en el estadio de los locales Mets, que ganaron los de Ohio 5-3.
Se confundieron en un abrazo y de inmediato se pusieron al día con relación a lo que ha estado ocurriendo con el inicio de sus carreras en las Grandes Ligas.
Ambos jugadores han expresado lo importante que fue su participación con los Campeones Nacionales y del Caribe durante la campaña anterior, en su desarrollo como jugadores y coinciden en que les gustaría repetir la experiencia.
En su corta estadía en el Big Show, De La Cruz ya se convirtió en el tercer jugador en la historia de las Ligas Mayores con un ciclo en los primeros 15 juegos de su carrera. Fue el primer jugador de los Rojos en robar tres bases en una entrada en al menos los últimos 60 años. A los 21 años, también es el jugador más joven de cualquier equipo en hacerlo en ese lapso.
El 16 de julio rompió el récord de Statcast de asistencia más rápida en el cuadro interior con un lanzamiento que alcanzó las 97,9 millas por hora.
Cuando disparó su quinto cuadrangular de la temporada, empató a Barry Bonds en 1986 con la segunda menor cantidad de juegos necesarios para llegar a 5 jonrones y 15 bases robadas desde 1900, alcanzando la marca en el juego número 40 de su carrera.
En 24 partidos en la pelota dominicana, De La Cruz tuvo un porcentaje de bateo de .286 (84-24) con un OBP de .396, .417 de slugging y un OPS de .813. Anotó 19 carreras, remolcó 14 con cuatro dobles, dos triples, su histórico cuadrangular y nueve bases robadas en 13 intentos.
Cuando participó en el partido número 30 de su carrera ya se había convertido en el único jugador en la historia de la MLB con 40 hits y 15 bases robadas en sus primeros 30 juegos.
Mientras que Mauricio, puso a viajar la pelota a una distancia de 440 pies de distancia, con una velocidad de salida de 111.4 millas por hora para su primer cuadrangular en la gran carpa.
Su temporada de Más Valioso en la LIDOM, incluyó un promedio de bateo .287, cinco cuadrangulares, 31 carreras producidas y 11 robos en 46 partidos, uniéndose a sus compañeros César Valdez, Emilio Bonifacio, Audo Vicente y José Offerman como los azules premiados en la pasada temporada del béisbol dominicano.